La historia de nuestra querida amiga Pepita
Pepita sentía que algo en su interior, no lograba concretar muy bien el qué, no funcionaba del todo bien.
Ella no se ocupaba de sus asuntos porque tenía miedo. Prefería no escucharse, restarse importancia y llenar su día de más y más tareas, actividades y problemas que la ayudaban a distraerse.
Un día decidió que iba a enfrentarse a aquello que durante tanto tiempo había estado evitando.
Había tomado la firme resolución de descubrir la verdad.
!Y lo consiguió!
Y se diluyeron la presión en el pecho, los dolores de cabeza, el hambre emocional, mejoró la concentración, su forma de relacionarse con ella misma y con los demás.
Cuando Pepita reunió el amor propio, valentía y honestidad suficientes para investigar y encontrar solución a su problema, no tenía muy claro por dónde empezar.
Dedicó mucho tiempo a leer, buscar por Internet, incluso consultó con varios amigos y acudió a un profesional especializado carísimo.
Se dió cuenta que se trataba de un proceso largo, costoso y se desanimó.
Se sentía frustrada, enfadada y triste porque no lograba estar estar en paz. Sin ella saberlo, habían unas creencias que la acompañaban todo el tiempo y que dirigían su enfoque.
Cuanto más se autoexigía más avergonzada estaba.
Cuando Pepita empezó su proceso de terapia no era conocedora de que iba a tomar ella misma las riendas, de que iba a aprender a utilizar herramientas sencillas que le permitirían poco a poco experimentar, descubrir una nueva mirada, conocerse, sentirse, ganar confianza, seguridad y entrar en un bucle donde crecer y sanar.
A su ritmo, respetándose, se fue dando cuenta...
Se fue sintiendo digna porque repartió responsabilidades de aquello que sucedió y se liberó de la culpa.
Respiró a su adulta, aprendió a cubrir sus necesidades y también las que le faltaron de niña.
Tomó conciencia, se despidió y soltó viejos patrones que se manifestaban en su vida actual.
Pepita, cada vez más curiosa y alegre, se divertía flexibilizando sus propias reglas para ser más feliz.
En la actualidad, se siente agradecida por todas sus experiencias, aprendizajes y orgullosa de Ser, de estar aquí con nosotros.